Con el envejecimiento viene la sabiduría y la experiencia. En una determinada etapa de la vida, las personas comienzan a darse cuenta de la importancia de cuidar su cuerpo y tomar decisiones que les brinden alegría y una sensación de plenitud. La sociedad suele hablar sobre qué empezar a hacer a medida que uno envejece. Sin embargo, pensar en lo que deberías dejar de hacer para vivir mejor suele ser igual de importante.
Para los mayores de 65 años, los años dorados pueden ser sumamente gratificantes. Es un momento liberador para divertirse y seguir pasiones que quizás haya pospuesto. Pero a lo largo del camino, podrías considerar hacer algunos ajustes para maximizar tu disfrute.
Cada década de la vida trae consigo necesidades únicas para sentirse lleno de energía y prosperar. Para cualquier persona mayor de 65 años, podría significar comenzar nuevos hábitos, mudarse a un lugar nuevo o hacer nuevos amigos. Entonces, si estás en esa franja de edad, podrías considerar dejar de hacer estas 20 cosas que están afectando tus niveles de energía y tu salud mental.
1. Descuidar la higiene del sueño
Es un mito común que las personas mayores necesitan dormir menos. Si bien es cierto que pueden tener dificultades para dormir bien, aun así necesitan dormir entre 7 y 9 horas. Los ciclos de sueño deficientes pueden provocar un mayor riesgo de enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas, diabetes y depresión, así como afecciones cognitivas, de memoria y de toma de decisiones que ponen en peligro su seguridad y bienestar general.
Para mejorar el sueño, pruebe cambios en el estilo de vida, como dormir en un horario constante, reducir el tiempo frente a la pantalla antes de acostarse y controlar el estrés con respiración profunda y meditación. Además, reduzca la cafeína y el alcohol, manténgase activo durante el día y hable con su médico si tiene problemas de sueño para promover una mejor calidad del sueño.
2. Dependencia excesiva de los analgésicos
Las personas mayores son propensas a desarrollar diferentes problemas de salud como artritis u otras enfermedades crónicas que causan dolores intensos en el cuerpo. Para obtener un alivio rápido del dolor, recurren a los analgésicos sin considerar sus efectos secundarios. El uso excesivo de analgésicos, especialmente opioides, puede provocar adicción y dependencia, especialmente en adultos mayores que pueden ser más sensibles al impacto de estas drogas.
Los opioides son seguros para el dolor a corto plazo si se toman en las dosis correctas durante un período breve. Pero cuando las personas continúan tomándolos, es posible que necesiten más y más para sentirse mejor porque su cuerpo se acostumbra a ellos. Con el tiempo, se vuelven menos eficaces para reducir el dolor. En consecuencia, se hace necesario aumentar la dosis para mantener ese beneficio.
Afortunadamente, existen otras formas de controlar el dolor. Las personas mayores pueden probar fisioterapia y ejercicios o hablar con un médico sobre diferentes medicamentos no opioides o tratamientos alternativos para aliviar el dolor sin depender demasiado de los analgésicos.
3. Saltarse el ejercicio
No eres demasiado mayor para hacer ejercicio porque has cumplido 65 años. Si bien tener 60 años puede parecer tener 40 nuevamente, se necesita esfuerzo para mantener esa sensación y saltarse el ejercicio no te ayudará a lograrlo.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, los adultos de 65 años o más deben intentar realizar al menos 150 minutos de actividad moderada cada semana, como caminatas rápidas, o 75 minutos de actividad vigorosa, como trotar.
El ejercicio regular te fortalece y te hace estar en forma, ayuda a mejorar la salud cardiovascular y mejora el estado de ánimo y los niveles de energía. Sepa que algo de ejercicio siempre es mejor que nada de ejercicio.
4. Beber en exceso
Las personas mayores pueden beber en exceso porque tienen el hábito de hacerlo sin darse cuenta de que sus cuerpos se han vuelto sensibles y no pueden soportar los efectos del alcohol como antes. Algunos pueden recurrir al alcohol para afrontar el estrés y la soledad, especialmente después de perder a un ser querido.
Según el Instituto Nacional sobre el Abuso de Alcohol y Alcoholismo, está bien que los adultos mayores beban 2 tragos o menos por día para los hombres y un trago por día para las mujeres. Sin embargo, exceder estos límites puede generar problemas.
Los datos sugieren que alrededor del 20% de las personas entre 60 y 64 años y alrededor del 10% de los mayores de 65 años beben en exceso, lo que puede provocar una variedad de problemas.
5. Fumar
Fumar en la vejez acelera el envejecimiento, provoca arrugas, decoloración de los dientes y un sistema inmunológico más débil, lo que conduce a otras enfermedades graves como cáncer de pulmón, ataques cardíacos y problemas respiratorios. Además, fumar a partir de los 60 años está relacionado con puntuaciones cognitivas deficientes, según la Asociación Estadounidense de Accidentes Cerebrovasculares.
Antes de que piense que es demasiado tarde para dejar de fumar y que el daño ya está hecho, la buena noticia es que la investigación dice además que dejar de fumar en edades avanzadas tiene inmensos beneficios. Puede retardar el progreso de problemas de salud a largo plazo, mejorar la memoria y la concentración y ayudar a que los medicamentos empiecen a funcionar mejor.

6. Estilo de vida sedentario
Ser sedentario es el peor estilo de vida que puedes adoptar porque ninguna actividad física puede incapacitarte, dificultando la realización de las tareas diarias (si la usas, la pierdes). Además, es más probable que un adulto mayor tenga problemas como obesidad, presión arterial alta, dolor de espalda y depresión.
Además, estar demasiado tiempo sentado puede crear vibraciones negativas a tu alrededor, que afectan tu bienestar cognitivo.
Es importante liberarse de este estilo de vida y volverse activo. Puede comenzar dando pequeños pasos, como caminar, estirarse, hacer jardinería o nadar. Luego, aumente gradualmente sus niveles de actividad y encuentre actividades agradables y adecuadas para sus problemas de salud.
7. Aislamiento social
Las personas mayores se aíslan socialmente cuando tienen menos relaciones sociales y no tienen contacto con ellas. Se retiran de las actividades sociales principalmente por problemas de salud o porque sus seres queridos ya no están cerca.
Sin embargo, deberían encontrar nuevas formas de comunicarse con sus amigos y familiares, especialmente a través de videollamadas o uniéndose a grupos comunitarios para hacer nuevos amigos.
El aislamiento social tiene un grave impacto en la longevidad de las personas mayores, su salud física y mental y su calidad de vida. Entonces, da un paso adelante y conéctate con tus mejores amigos y ten conversaciones significativas con ellos.
8. Aferrarse al estrés
Cuando nos sentimos estresados, nuestro cuerpo libera sustancias químicas como adrenalina y cortisol. Estos químicos nos ayudan a reaccionar rápidamente en situaciones peligrosas, pero si estamos estresados durante mucho tiempo, provocan reacciones dañinas en el cuerpo.
El cortisol, la hormona del estrés, puede debilitar el sistema inmunológico y hacernos más susceptibles a infecciones y enfermedades. La adrenalina aumenta la frecuencia cardíaca y la presión arterial, forzando el sistema cardiovascular cuando se activa con demasiada frecuencia.
Para abordar el estrés, es importante descubrir su origen y encontrar formas de deshacerse de él. Puede ser difícil, pero actividades simples como respirar profundamente, caminar, practicar yoga o tener una conversación sincera con alguien en quien confiamos pueden ayudar a reducir los niveles de estrés.
9. Viajar solo
Puede que no sea fácil dejar de viajar, especialmente si te gustaba explorar nuevos lugares y vivir aventuras cuando eras más joven. Sin embargo, viajar solo siendo una persona mayor puede tener sus desafíos.
Las personas mayores son más vulnerables a atención no deseada o incluso a ataques por su cuenta. Además, en caso de cualquier contratiempo en su viaje, puede resultarles difícil superarlo. Si su pasión por los viajes le impide sentarse, una forma segura es viajar con amigos o unirse a un grupo de viaje.
De esta manera, aún podrás disfrutar viendo lugares nuevos y probando cosas nuevas, pero tendrás otras personas cerca para ayudarte si es necesario. También podrás hacer nuevos amigos en el camino.
10. Apegarse a hábitos alimentarios poco saludables
El envejecimiento puede hacer que su metabolismo se ralentice, por lo que es posible que no digiera todo tan eficientemente como antes. Las personas de 60 años o más necesitan una dieta equilibrada y nutritiva rica en frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras y grasas saludables.
Es fundamental dejar de lado casi todo (con moderación) que tenga exceso de azúcar, grasas o alimentos procesados, ya que son los principales contribuyentes a diversos problemas de salud tanto en adultos jóvenes como mayores.
Las comidas caseras son las ganadoras para todas las edades. Ayudan a limitar el tamaño de las porciones y están repletos de ingredientes nutritivos y equilibrados. Y cuando se le antoje un refrigerio, opte por opciones ricas en nutrientes.

11. Ignorar el seguimiento regular de las enfermedades
Las personas mayores corren un mayor riesgo de desarrollar complicaciones por hipertensión o diabetes no controladas y, sin un seguimiento adecuado, estas afecciones pueden crecer silenciosamente sin que nadie lo sepa.
Entonces, los adultos mayores deben priorizar su salud, controlar estos niveles (presión arterial, azúcar en sangre, etc.) y gestionarlos bien para mantenerse saludables.
Deben buscar orientación de profesionales de la salud sobre cómo y cuándo controlar su presión arterial y sus niveles de azúcar en sangre y configurar alarmas para ayudarles a recordar.
12. Levantar pesas pesadas
Si bien conseguir músculos grandes podría haber sido tu objetivo de acondicionamiento físico cuando eras más joven, levantar pesas ahora puede hacer más daño que bien a los adultos maduros. Si bien no está prohibido levantar pesas (¡se recomienda encarecidamente para la salud ósea!), las personas mayores deben priorizar la seguridad y evitar exagerar.
En lugar de levantar pesas pesadas e intentar competir en competiciones de culturismo, concéntrate en pesas más ligeras con más repeticiones u opta por ejercicios de peso corporal y bandas de resistencia. Esto ayudará a mantener la resistencia muscular, la fuerza y la salud ósea.

13. Gastar demasiado
Durante la jubilación, puede resultar tentador utilizar sus ahorros para mantener su estilo de vida anterior o mantenerse al día con sus pares. O quizás te gusta ir de compras sólo porque te sientes solo y gastas demasiado. Desafortunadamente, este gasto excesivo puede vaciar la cuenta de ahorros demasiado rápido y dejarle con dificultades financieras más adelante.
Aunque las personas mayores gastan menos que los más jóvenes, una vez que tienes más de 60 años, es importante ser más consciente de tus gastos.
Aún así, recuerda que estos son tus años dorados y necesitas disfrutarlos sin estrés. Con una planificación y un presupuesto cuidadosos, podrá administrar bien sus finanzas y encontrar la felicidad financiera y emocional.
14. Ignorar los síntomas de salud
La razón principal por la que las personas mayores ignoran los síntomas es la negación. Es posible que no quieran creer que tienen una enfermedad grave que podría causar daño. A veces, podrían pensar que los síntomas son simplemente una parte normal del envejecimiento.
Pero una molestia menor podría convertirse en un problema mayor que requiera atención médica rápida. Ignorar estos signos retrasa el diagnóstico y el tratamiento y permite que la enfermedad crezca dentro de usted.
Cuidar tu cuerpo es importante, así que no lo ignores si algo te parece mal. Los chequeos regulares con su médico pueden ayudar con un diagnóstico temprano y un tratamiento oportuno. También debes ser plenamente consciente de las enfermedades comunes en las personas mayores para poder estar atento a ellas.
15. Resistir la tecnología
Las personas mayores suelen sentirse intimidadas por las nuevas tecnologías, lo que genera tecnofobia. Su miedo a lo desconocido les hace sentir ansiosos por utilizarlo.
En el mundo actual impulsado por la inteligencia artificial, cuando dependemos completamente de la tecnología para comunicarnos y acceder a la información para administrar las finanzas y la atención médica, todos deben aprender y comprender la tecnología; de lo contrario, se quedarán atrás.
Al resistirse a la tecnología, los adultos mayores pierden la oportunidad de conectarse con sus seres queridos, lo que puede conducir a la soledad y el aislamiento.
Además, la tecnología también puede hacer que la atención sanitaria sea más fácil y mejor para ellos. Con las aplicaciones de atención médica, pueden programar citas, solicitar recetas y acceder a registros médicos en línea. También pueden consultar con los médicos de forma remota y realizar un seguimiento de los signos vitales mediante dispositivos portátiles.
16. Saltarse las vacunas
Saltarse las vacunas es un riesgo que las personas mayores no deberían correr. Con la edad, el sistema inmunológico se debilita, lo que dificulta la lucha contra las infecciones. Sin vacunación, enfermedades como la gripe, la neumonía y el herpes zóster pueden crear complicaciones graves que eventualmente conducen a la hospitalización o consecuencias graves.
Según la Fundación Nacional de Enfermedades Infecciosas, los adultos mayores enfrentan un mayor riesgo de sufrir complicaciones por muchas enfermedades prevenibles con vacunas. Actualmente hay 15 enfermedades contra las cuales los adultos de 65 años o más deberían vacunarse.
Las personas mayores deben comprender la importancia de la vacunación para su salud. Deben hablar con su proveedor de atención médica acerca de recibir las vacunas que omitieron. Y qué vacunas necesitan según su edad y condiciones de salud.

17. Negarse a actualizar los documentos legales
La vida es impredecible, y también lo es nuestra relación con los demás. Circunstancias inesperadas pueden cambiar circunstancias de la vida, como matrimonios, divorcios, nacimientos o muertes en la familia. Es mejor actualizar sus documentos legales con regularidad, como testamentos y poderes, para garantizar la distribución adecuada de sus activos de acuerdo con sus deseos y deseos actuales.
No hacerlo puede dar lugar a disputas entre miembros de la familia o beneficiarios no deseados que reciben activos.
Para evitar estos problemas, puede consultar con un abogado para revisar y actualizar sus documentos legales. También debe comunicar cualquier cambio a los miembros de su familia u otras partes relevantes para asegurarse de que todos conozcan sus deseos e intenciones.
18. Depender únicamente de la renta fija
Aproximadamente el 42% de los estadounidenses de 60 años o más dependen únicamente de ingresos fijos del Seguro Social. En tiempos de inflación vertiginosa, los ingresos fijos provenientes de las pensiones o de la Seguridad Social pueden no ser suficientes para cubrir todos los gastos, y será imposible manejar emergencias inesperadas.
Para mantenerse al día con el ritmo de la inflación, puede explorar trabajos a tiempo parcial, como trabajar por cuenta propia, para obtener ingresos adicionales. También puedes invertir tus ahorros en bienes raíces o acciones y dejar que el dinero trabaje para ti. De esta manera, puede diversificar sus flujos de ingresos para reducir la dependencia de la renta fija y lograr una mayor seguridad y estabilidad financiera.
19. Conducir cuando no es seguro
Conducir es una forma de mantener la independencia para muchas personas mayores, permitiéndoles hacer compras, asistir a eventos sociales y acceder a la atención médica sin depender de otros. Sin embargo, nuestra capacidad para conducir puede disminuir a medida que envejecemos debido a reflejos más lentos, disminución de la visión y reducción de la audición.
Es fundamental reconocer cuándo es el momento de dejar de conducir por su propia seguridad y la de los demás en la carretera. Las personas mayores deben evaluar periódicamente sus habilidades de conducción para tomar decisiones informadas sobre cuándo podría ser el momento de colgar las llaves.
Puede incluir autoevaluaciones, evaluaciones profesionales realizadas por un instructor de manejo o recomendaciones de un proveedor de atención médica.
20. Recolectar demasiadas cosas
Aferrarse a la acumulación de cosas de toda una vida puede volverse complicado e inmanejable.
A veces, las personas mayores coleccionan cosas por valor sentimental, piensan que podrían necesitarlas más adelante o se sienten abrumadas al revisarlas todas.
Pero todas esas cosas pueden desordenar tu espacio vital, dificultando mantener las cosas ordenadas, seguras y tranquilas en casa. Las personas mayores deberían ver las ventajas de ordenar, no sólo por su espacio sino también por su tranquilidad.
19 cosas que no debes temer a medida que envejeces
A medida que envejecemos, es común que nuestros miedos crezcan junto con nosotros y, a veces, nos impidan disfrutar de la vida. Muchas de estas preocupaciones surgen de no saber qué sucederá a medida que envejezcamos. Los medios de comunicación (sociales y noticiosos) también hacen que las personas mayores teman innecesariamente acerca de su salud y vitalidad, presentando a menudo un panorama de desastre, deterioro y enfermedad.
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14 aspectos difíciles del envejecimiento que nadie comparte
Algunas personas celebran las primeras canas y la primera arruga, mientras que otras se horrorizan ante el primer signo de envejecimiento y hacen todo lo posible para eliminarlo. Los signos reveladores del envejecimiento provocan diversas reacciones, pero todas indican una cosa: este tren envejecido no dejará a nadie abandonado.
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17 cosas locas que eran aceptables para los niños en la década de 1960
Muchos de los comportamientos que se consideraban normales en los niños de la década de 1960 resultarían mortificantes para la gente de hoy. Si los padres de los años 60 criaran a sus hijos de la misma manera en el mundo actual, es posible que encontraran servicios sociales llamando a sus puertas. A medida que pasa el tiempo, también lo hacen los métodos de crianza y el nivel de supervisión y exposición que se brinda a los niños.
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