Qué buscar en un líder emocionalmente sano en el lugar de trabajo

Probablemente haya experimentado muchas de las señales de un líder poco saludable: la microgestión, los ataques, la falta de apoyo y las metas en constante movimiento. Encontrar un líder saludable en espacios profesionales, corporaciones y organizaciones sin fines de lucro puede parecer como encontrar una aguja en un pajar.

Dado que casi el 40% de las mujeres negras abandonan sus lugares de trabajo porque se sienten inseguras, claramente hay trabajo por hacer. Las presiones, la falta de apoyo y las microagresiones que las mujeres negras experimentan de manera única en el lugar de trabajo pueden crear la tormenta perfecta que conduce a la ansiedad laboral.

Entonces, ¿cómo pueden las mujeres negras discernir los lugares de trabajo y los líderes tóxicos? Esto es lo que debe buscar en un líder emocionalmente sano en el lugar de trabajo.

Escuchan intencionalmente

Los líderes emocionalmente sanos son tanto líderes como oyentes. Saben cuándo dar un paso al frente y hacerse cargo, pero también saben cuándo dar marcha atrás y escuchar a su equipo. El peor tipo de líderes habla todo el tiempo y nunca deja que sus equipos digan una palabra. Puede parecer que hablan sólo para ser escuchados en lugar de tener información valiosa o instrucciones para compartir.

Los líderes emocionalmente sanos escuchan y hacen preguntas. Entienden y valoran las voces, opiniones e ideas de su equipo.

Lideran con empatía

Los líderes emocionalmente inteligentes lideran con empatía. Saben ponerse en el lugar de los demás. Buscan señales verbales y no verbales. Además de estar en sintonía con las emociones de los demás, los líderes emocionalmente sanos saben cómo reconocerlas y responder a ellas, incluso si no están de acuerdo.

Se comunican claramente

Una parte de la inteligencia emocional es tener fuertes habilidades sociales. Los líderes emocionalmente sanos pueden comunicarse, no sólo de manera carismática, sino también de una manera clara y directa. Pueden delinear metas y pasos claros para alcanzar aquellas metas que empoderen a los empleados de su equipo. Comunicar claramente los objetivos mantiene motivado a su equipo y les ayuda a sentirse realizados una vez que cruzan la línea de meta.

Modelan el equilibrio entre la vida personal y laboral

Muchos líderes en puestos directivos o de nivel superior se suscriben al estilo de vida ajetreado. Incluso personas influyentes en plataformas sociales como LinkedIn publican sobre trabajar en días festivos y fines de semana. Sí, el trabajo duro es fundamental para el éxito, pero no se debe elogiar el agotamiento.

Los líderes emocionalmente sanos modelan el equilibrio entre la vida laboral y personal para sus equipos. Se desconectan después del horario laboral y utilizan su PTO para vacaciones o simplemente para tomarse un día de salud mental. Modelar este comportamiento anima a los empleados a hacer lo mismo y establecer límites entre el trabajo y su vida personal.

Lideran con autoconciencia

Los líderes deben evitar caer en la cultura del ajetreo y el agotamiento las 24 horas del día, los 7 días de la semana, porque les hace desconocer lo que sucede dentro de ellos. Los líderes emocionalmente sanos están en sintonía con sus cuerpos físicos, ya sea que estén fatigados o cansados o si tengan dolor de cabeza o de estómago. También están en sintonía con su salud emocional y son desencadenantes. Pueden identificar cuándo se sienten estresados, abrumados, decepcionados y las causas de esas emociones.

Esta capacidad de los líderes emocionalmente sanos de ser conscientes de sí mismos se traduce en sus relaciones profesionales. Son conscientes del impacto que sus palabras y acciones tienen en los demás, lo que los convierte en líderes fuertes.